Nuestros chicos y chicas de itinerante han comenzado su andadura, desayunaron temprano y, tras recibir la bendición del peregrino por parte del P. Fernando Meseguer SJ, salieron del albergue en dirección a su 'casa' de esta noche, el pueblo de Villarrabé.
La suerte del tiempo se puso de su lado, con una brisa y temperaturas agradables que les acompañaron a lo largo de los casi 19 km de camino.
Tras una reponedora comida de ensaladilla rusa, pollo asado con patatas y flan, un pequeño rato de descanso, las primeras curas de ampollas, y los primeros juegos de conocimiento, todo ello, antes de ponerse a montar las tiendas de campaña, con mayor o menor acierto, eso si, seguro que en muy poco tiempo todos lo harán a la primera...
La sorpresa del día llegó cuando de forma inesperada la junta vecinal del pueblo se acercó para invitarnos a su piscina, cuya existencia desconocíamos, un refrescante momento que pudimos vivir gracias a la enorme hospitalidad de los vecinos de Villarrabé.
Para cerrar el día juegos de velada, no sin antes disfrutar de la cena, huevos rotos con bacon, salchichas con ensalada y yogur.
Un día muy completo, con un merecido descanso para mañana llegar a Cervatos de la Cueza y la villa romana de La Tejada.
Mañana más y mejor, mientras tanto os dejamos el enlace a la galería de fotos...
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